Configuraciones Familiares
Las Configuraciones son un trabajo terapéutico que se puede realizar en todo tipo de sistemas humanos, familias, grupos, empresas, instituciones, etc. Se trabaja con la persona y la red de sus vínculos.
Se basan en la Técnica de constelaciones Familiares (creada por el terapeuta alemán
Bert Hellinger) y en nuestro enfoque grupal gestáltico.
En este trabajo consideramos que algunos de los síntomas físicos o psíquicos que las personas presentan pueden tener su origen en la historia familiar, a veces de sucesos (pérdidas, asesinatos, suicidios, exclusiones de personas, secretos, etc.) que no han sido transmitidos en forma conciente.
A través de una Configuración se puede traer a la luz la dinámica que causa el sufrimiento o la dificultad y, si el sistema lo permite, ordenarla para sanar.
Le idea base es que n o podemos desarrollarnos con plenitud y normalidad sin integrar nuestro pasado.
Sin raíces, el árbol no puede desarrollarse en todo su esplendor, o dicho de otro modo “sin raíces no hay alas”.
Las Configuraciones nos brindan la imagen del camino hacia un nuevo lugar, más natural, ordenado y coherente dentro del sistema familiar, permitiéndonos conectar con un amor más profundo y saludable. Entonces, más que una carga, nuestros orígenes se experimentan como una fuente de fuerza.
El trabajo beneficia no solo al paciente que configura y a su sistema, sino que tiene un profundo alcance terapéutico sobre todos quienes participan del Taller. De cualquier manera, las Configuraciones no son algo que se pueda explicar fácilmente. La única manera de entenderlo es asistiendo a un Taller.
¿Para que sirven las configuraciones familiares?
En todo sistema familiar existen leyes no habladas que pueden estarnos gobernando sin que seamos concientes de ello. Muchos problemas tienen una raíz sistémica. A veces podemos ver los síntomas a través de situaciones que se repiten, como por ejemplo sincronías en edades, causas o fechas de fallecimiento, dificultades para crear una relación de pareja duradera , problemas con los hijos, problemas con los padres o hermanos, problemas con el otro sexo o con el propio, destinos difíciles (muertes prematuras, abortos, asesinatos, estafas, robos, personas excluídas, abusos...), o en algunas enfermedades físicas (como cáncer, enfermedades autoinmunes, etc.,…), algunos trastornos psíquicos (esquizofrenia, autismo, tendencias suicidas, anorexia, bulimia, etc.), adicciones (drogas duras, tabaco, alcohol, juego...), etc.
El Método
Cada coordinador tiene una manera diferente de trabajar, pero básicamente una Configuración se desarrolla de la siguiente manera:
El paciente que abre su Configuración expone el asunto que le preocupa, y elige entre los participantes del taller representantes para aquellas personas o aspectos que le indique el coordinador.
A continuación los coloca en el espacio de acuerdo a su imagen interna. De esta forma, creamos un modelo vivo. Lo único que tienen que hacer los representantes es sentir, y dejarse llevar, ya que comienzan a tener sensaciones corporales y/o emocionales que pertenecen a quien están representando, y es en base a esas manifestaciones que trabaja el coordinador, quien va acompañando al paciente en el desarrollo de la configuración, observando lo que expresan los representantes, preguntando y ayudándose a veces con frases puntuales y/o con movimientos corporales, buscando una imagen de solución.
En Encuentro realizamos estos talleres grupales a cargo de un equipo de coordinadores, en los cuales se puede participar de distintos modos: como paciente , exponiendo un problema o síntoma para trabajar; como representante , poniéndose al servicio del paciente para representar a algún miembro de su familia; y finalmente, como participante, observando aquello que va ocurriendo y realizando ejercicios grupales, además de ir dejándose resonar en el trabajo de los otros.
En cualquiera de estas formas las Configuraciones tienen un efecto terapéutico, ya que muchos problemas tienen aspectos comunes y las configuraciones de otros nos ayudan a ir ordenando internamente aquello que es disfuncional en nuestro sistema.
¿A quiénes puede interesar este trabajo?
A todas las personas que quieran encontrar una solución a asuntos o síntomas que les causen dificultades recurrentes en su vida, o que les resulten de difícil comprensión, o aspectos de sí mismos que comprenden pero que no logran cambiar.
A los profesionales de la salud (psicólogos, médicos, enfermeros, etc.) y de la ayuda (asistentes sociales, abogados, educadores, jueces, escribanos, mediadores, etc.), para tener otra comprensión de las situaciones que se les presentan cada día.
A cualquier persona que quiera aumentar el conocimiento de sí misma y de sus raíces, y ampliar la mirada respecto a las implicancias sistémicas de sus relaciones.